

Ayer, cuando fuimos a Stuttgart montamos en un tren de los años 30 para ir hasta el cementerio principal de Stuttgart. Teníamos que subir una cuesta ,aunque hubieramos llegado antes andando porque el tren era muy lento. Era un tren de madera y muy viejo. Todavía no sabemos porque lo llaman el rápido de las viudas ,porque más bien sería el lento de las viudas.
Un tren viejo, mejor digo yo, que será antiguo, con el encanto de tiempos pasados y seguro que la velocidad era para que se aprecie el bonito paisaje.
ResponderEliminarbesos desde San Cristobal.